Dignidad humana, Solidaridad, Sostenibilidad Ecológica, Justicia Social, Participación democrática y transparencia.
Como muchas de las presentes, nos reconocíamos identificadas con estos valores que la Economía del Bien Común ha sabido estructurar. De un modo u otro, en mayor o menor grado, las allí presentes respondíamos a una inquietud interna,a una nueva conciencia que nos impulsaba a buscar y unirnos a otras personas con las mismas inquietudes.
Estudiamos la matriz, y nuestro grupo se centró en analizar los criterios con los que mejor se identificaba el proyecto que elegimos: El PlanVe, de nuestras compañeras Vanesa y Angélica. Antes de haber oído hablar de Economía del Bien Común ellas habían seguido sus criterios (no nos sorprendió: era un proyecto de personas con conciencia social ). De modo especial, el proyecto se ajustaba al criterio de "Concepción social del servicio" y a "Orientación de los beneficios al bien común". Terminado el trabajo en grupo, Vanesa lo explicó al resto de los asistentes.
Hubiéramos podido hablar de nuestros otros proyectos: Enrique de Educación para el Empleo, José Luis del Huerto, o Iván, nuestro recién llegado colaborador de la Universidad, de Minatural (proyecto que le entusiasma) pero no hubo tiempo, había muchas más empresas.
Para terminar, la quesería Cantagrullas nos obsequió con una cata de quesos. Paladeamos no sólo el sabor de los productos sino todo lo que esos productos significaban: el entusiasmo de dos jóvenes historiadores que deciden volcarse en un proyecto en un pueblo de 8 habitantes y crear una empresa que ya da trabajo a 6 personas, abrazada a la tierra, cuidadosa con ella, una empresa capaz de cooperar y compartir con otras empresas ( Iván habla con ellos, toma su contacto pensando en Minatural...) Como dice Rubén, mientras nos ofrece el queso: ese queso que sabe a las hierbas de nuestra tierra,a romero...
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